Cadencia de carrera: Todo en equilibrio.
Cuando se trata de la forma de correr, hay muchos factores diferentes a considerar. Uno de los aspectos más discutidos es la cadencia, o el número de pasos por minuto. Si bien la cadencia es un factor importante a considerar, es importante recordar que no es lo único que importa.
Una consideración importante cuando se trata de la forma de correr es la pisada. El golpe con el pie se refiere a la parte del pie que hace contacto primero con el suelo al correr. Hay tres tipos principales de pisada: pisada con el talón, pisada en el mediopié y pisada con el antepié.
En los últimos años, se ha debatido mucho sobre la idea de aterrizar por debajo de nuestra masa corporal al correr. La teoría es que al aterrizar debajo de nuestro cuerpo, podemos reducir las fuerzas de impacto en nuestras articulaciones y mejorar nuestra eficiencia al correr. Aquí es donde suele entrar en juego la conversación sobre la cadencia. Cuando corremos con una cadencia más alta, tendemos a dar zancadas más cortas y aterrizar más por debajo de nuestra masa corporal.
Si bien es cierto que una cadencia más alta puede ayudarnos a aterrizar por debajo de nuestra masa corporal, no es el único factor a considerar. De hecho, algunos corredores tienden naturalmente a aterrizar más hacia el antepié o el mediopié, incluso con una cadencia más baja. Además, factores como la velocidad de carrera, el terreno y la fatiga pueden afectar la pisada y la cadencia del pie.
Entonces, si bien probablemente sea ventajoso prestar atención a nuestra cadencia y esforzarnos por lograr una mayor cantidad de pasos por minuto, también es importante considerar nuestra forma de correr individual y lo que nos resulta más natural y cómodo. Experimentar con diferentes cadencias y golpes de pie puede ayudarnos a encontrar la mejor forma para nuestras necesidades y objetivos individuales.
Finalmente, el calzado que usamos puede tener un impacto significativo en nuestra biomecánica al correr. Diferentes zapatos pueden afectar la pisada, la longitud de la zancada y la postura general. Por ejemplo, los zapatos con mucha amortiguación pueden fomentar el apoyo del talón, mientras que los zapatos minimalistas pueden fomentar el apoyo del mediopié o del antepié. De manera similar, los zapatos con una caída alta desde el talón hasta la punta pueden fomentar una zancada más larga, mientras que los zapatos con una caída más baja pueden fomentar una zancada más corta. Es importante elegir unas zapatillas que sean adecuadas a nuestro estilo y objetivos de carrera individuales , así como al terreno y la distancia que correremos. Los zapatos que calcen adecuadamente y que respalden las capacidades naturales de nuestros pies pueden ayudar a mejorar nuestra forma de correr y mejorar nuestro rendimiento general.
En conclusión, la cadencia de carrera es un factor importante a considerar cuando se trata de la forma de correr, pero no es lo único que importa. Al prestar atención a nuestra pisada, experimentar con diferentes cadencias y elegir el calzado adecuado para correr, podemos encontrar la mejor forma para nuestras necesidades y objetivos individuales.
Sigue adelante.